FROM THE LAND OF THE RAISING SUN

17/12/2012 Japon es iluminador, como el sol que nace a la mañana y te hace abrir los ojos para despertarte. Viajar por acá es ser testigo de un país que se despierta y se levanta cada día con el objetivo de crecer e ir para adelante. Esta nación ha sufrido cosas tremendas, bombas atómicas, terremotos y tsunamis... y a pesar de todo, se recupera siempre, pase lo que pase. Las ciudades son relucientes y la naturaleza, cuando permanece calma, es simplemente despampanante.
Lamentablemente estuvimos pocos días y no llegamos a recorrer la isla completamente, pero nos llevamos un buen panorama habiendo visitado dos de las ciudades más importantes: Tokyo y Kyoto. Dos lugares preciosos que así como tienen de invertido el nombre, también tienen invertido TODO. Tokyo es moderna, dinámica y gigante, y Kyoto es por el contrario antigua, tranquila y manejable.
En Tokyo no paramos... pasamos unos días muy intensos tratando de recorrer todos los barrios, paseos y mercados. Y creo que en gran parte lo logramos!. Para empezar fuimos al Tokyo más antiguo y cultural en el barrio "Ueno", en donde hay muchos museos y un parque DIVINO lleno de templos centenarios y árboles espectaculares. Tengo que confesar que tengo una debilidad por los árboles, las plantas y las flores... la naturaleza me fascina y en Japon me volví loca por la riqueza de sus paisajes. Mientras caminábamos por este parque mágico con los árboles radiantes de colores otoñales, yo me sentía adentro de una de esas pinturas de biombos con panoramas orientales exéntricos... que yo hasta ahora pensaba que eran imaginarios. Las especies que hay acá en Japon, nunca las había visto en otro lado... los colores son de otro mundo... hojas amarillas y naranjas refuljentes que se mezclan con las torres de los templos y sus campanarios.
Lo gracioso es que en el medio de mi sueño real de biombos, templos y del otoño pintado, nos encontramos en el medio del parque con una bandita de bolivianos tocando la quena y la guitarra y dando todo un espectáculo. Y no es la primera vez que los vemos!! ya habíamos visto otra bandita en Hong Kong... y resulta que tienen un éxito bárbaro. Se ve que a los asiáticos les copa la música tradicional boliviana casi tanto como les gusta el tango. O sea... a ver si me entienden... los japoneses son FANATICOS del tango!! y perdonen, pero tengo que confesar que me dio un poco de risa ver a un tanguero japones cantando en la calle con su bandita y rodeado de gente aplaudiendo y admirando. Es como que no pega el tango en japones!! pero aparentemente acá si pega y mucho... porque no sé si se acuerdan, pero fue una pareja de japoneses los que ganaron el último campeonato mundial de baile del tango. Y Joaco y yo no sabemos ni hacer un pasito... que verguenza!! hasta en eso nos pasan el trapo.
Pero no somos los únicos humillados porque los japoneses todo lo que copian o adoptan de otros lados, lo hacen mejorado. Por ejemplo, en el medio de Tokyo hay una copia de la Torre Eiffel, que en realidad es una antena de comunicaciones a la que decidieron darle un touch francés... y a lo grande! porque la hicieron más alta que la original parisina... o sea: "ON YOUR FACE!". Con Joaco subimos hasta arriba porque nos lo habían recomendado... y efectivamente la vista de la ciudad es imperdible!! se ve absolutamente todo, hasta el mar, las montañas y los volcanes.
También fuimos al Palacio imperial y a los barrios más famosos y populares. El Palacio es lindísimo y esta rodeado de un parque gigantesco al mejor estilo Central Park... forma un oasis verde en el medio de la ciudad de cemento y modernidad. Y desde allí empezamos a pasear por el Tokyo céntrico: el barrio "Ginza" que es lujoso y tradicional y "Shibuya" que es un barrio de locura surreal... Una especie de lugar ficcional, lleno de luces y personajes extraños. Uno va caminando por ese mar de gente y de repente no se sabe si está rodeado de personas, de alienígenas o de muñecos adornados... porque algunos japoneses adolescentes curten una onda de vestirse cual personajes de dibujitos animados. Se puede pensar que estan RE LOCOS o simplemente que "les falto chirlo"... como diría mi hermano.
Después de ese Tokyo de dibujitos vivos y coleando, nos fuimos a otro lugar de fantasía digno de un cuento de hadas... o de gheishas, para ser más exactos.
Nos tomamos un tren bala, y al paso de dos horas y 500 kilómetros ya habíamos llegado al centro de Kyoto. Una maravilla absoluta!! Y estos trenes están por todo Japon, conectando al país entero en un abrir y cerrar de ojos. Yo estaba fascinada, mucho más cómoda que en un avión y mirando el volcán Fuji por la ventana.
Y perdonen el paréntesis, pero no puedo dejar de pensar en la pobre Kris!! que cuando quiso hacer un tren bala en Argentina la vetamos y abuchamos... pero imagínense lo que hubiera sido eso: estar viajando a 250 kilómetros por hora y que el tren se quede sin frenos por falta de mantenimiento. O sea, más que un tren bala eso hubiera sido un conjunto de giles haciendo el papel de balas humanas. Patético! Sería bueno que esta "capa-mafia" primero se encargue de mantener los trenes comunes y de hacer rutas como la gente... en lugar de dedicar su tiempo a llenarse los bolsillos saqueando al país, empobreciendo a la gente y expropiando todo. Es siniestra y desagradable.
Pero paréntesis aparte y volviendo a Kyoto... es emocionante ver que todavía quedan lugares como este!! PRECIOSO!! lleno de templos milenarios con jardines soñados. Los famosos jardines japoneses en su máxima expresión en el medio de unos paisajes montañosos alucinados. Ellos tratan de replicar el Eden mismo en el diseño de sus parques... y es increíble, pero lo han logrado. Caminar por esos lugares era, de vuelta, como estar en un cuadro. Los pinos, la disposición de los arbustos y las flores, todo rodeado de cascadas y pequeños lagos... Joaco se reía porque mientras la gente le sacaba fotos a los templos, yo estaba más concentrada en captar la composición de los distintos verdes de algun pino o arbol centenario.
La ciudad está llena de casas antiguas japonesas, construídas todas con materiales naturales y adornadas con sus techitos enrulados... las calles angostas y cruzadas por algun arroyo serrano... el sonido del agua en el centro de la ciudad y uno que otro puente colorido por los que la gente cruza de lado a lado. Kyoto es lindísimo... y ni me quiero imaginar lo que debe ser en primavera cuando estan todos los cerezos florecidos al máximo!! Un espectáculo.
De repente nos cruzábamos con alguna Geisha y empezábamos la persecución disimulada típica de un turista buscando un objetivo fotográfico. Para nosotros son todo una rareza, pero para ellos son una parte de su cultura de la que están muy orgullosos. A diferencia de lo que muchos creen, no son prostitutas sino entretenedoras... ellos las definen como "obras de arte vivientes" porque toda su manera de ser, de vestir y de entretener tiene que ver con algo muy bello e interesante. Y doy fe de que adornan la ciudad como si fueran seres fabulosos y esculturales, sus kimonos son PRECIOSOS y todo en ellas es una experiencia estética atrapante.
Al final solo puedo decir que no me quedan muchas más palabras para este viaje porque aunque intento hacerle justicia, Japon fue para mi un lugar indescriptible de esos que vale la pena vivir y sentir... más que seguir contando. Lo único que quisiera es terminar con lo que más me gustó de este lugar de sueños que sigo soñando:
Un día fuimos con Joaco a un pueblo a unos pocos kilómetros de Kyoto a ver un famoso bosque de bambues del que nos habían hablado. O sea... me voló la cabeza. Estar ahí en el medio de esa selva de troncos delgados y elegantes, con el sonido de las hojas que bamboleaban con el viento suave... yo no podía creer que tenía el privilegio de estar en un lugar tan absolutamente fascinante.
Lo voy a poner estos terminos:
Cuando me muera no quiero ver un tunel de luz como Victor Sueiro..
Simplemente desearía volver al bosque de bambues con el sonido dulce de las hojas bamboleantes... nada más que eso... y caminar con Joaco por allí, tranquila y felíz hasta llegar a este lugar de jardines paradisíacos y encontrarme a Dios aquí... en este Eden de montañas y naturaleza exuberante.
Mientras tanto sigo soñando en esta vida maravillosa que sólo es un avance de lo que Dios está tramando para mi verdadero viaje, el definitivo... el inigualable.

Besosss!! los quiero y extraño!!

pd: hagan click en la foto para ver las demás que van pasando.


Tokyo-Kyoto

SUSHI TIME IN TOKYO!!

16/12/2012 Perdonen que insista con el tema gastronómico, pero acá en Tokyo sería un pecado pasarlo por alto. Además, como sabrán, la comida es una parte importantísima de un viaje... y más cuando estas inmerso en una cultura tan distinta e intrigante.
Tokyo es quizas la ciudad más sofisticada del mundo en temas culinarios, tiene más restaurantes con 3 estrellas michellin que cualquier otra metropolis del globo terraqueo. Pero por más estrellas michellin que haya, el verdadero mérito se debe a que en relidad comes excelentemente en cualquier lado. Te podés meter en cualquier sucucho y encontrarte con la comida más deliciosa que hayas comido en años. En ese sentido me hace acordar a Peru un poco... y claro, la comida peruana debe ser tan exisita, en parte porque tiene las mejores influencias japonesas, chinas y europeas que se mezclaron con los alimentos incas de antaño.
Pero volvamos a Japon, la isla del tesoro culinario, un paraiso para los amantes del buen comer... y especialmente, para los amantes del buen comer pesacado (JOACO). O sea, no les puedo explicar la felicidad que tiene este hombre cada vez que entramos a comer sushi o cualquier comida japonesa ya sea en un buen restaurante o en un antro: FELICIDAD ABSOLUTA es poco! esta simplemente fascinado. Apenas llegamos me dijo: "Quiero comer sushi hasta morirme explotado" y les puedo asegurar que va bien encaminado. A esta altura ya tengo miedo de que le salgan aletas y escamas por todoos lados.
Yo en cambio soy un poco más conservadora, me doy una panzada una vez y después necesito un tiempito de comer otra cosa antes de volver a comer pescado.
Lo cierto es que este país se alimenta casi exclusivamente de peces, moluscos, mariscos y cualquier cosa que flote en los mares cercanos o lejanos. En serio, no le hacen asco a NADA... en los mercados venden lo que se te ocurra: pulpos, anguilas, cangrejos, calamares, ostras, todo tipo de algas y cualquier parte del pescado. O sea, no tiran nada, se comen los ojos, las mandibulas, las aletas, el semen, los huevos... con distintos tipo de salsas... fresquitos o disecados. Lo máximo fue encontrarme en un kiosco con bolsitas de Hello Kity para los niñitos, que adentro contenian pulpitos disecados... como quien vende caramelos o chupetines con envases de dibujitos animados. Loquísimo! casi le compro unos pulpitos a mi sobrinita, pero después me arrepenti porque mi hermana me iba a sacar carpiendo... y ni hablar de mi cuñado.
El mercado más grande de Tokyo se llama Tsujiki y es una especie de mercado de Liniers pero de pescados. Todas las mañanas hacen subastas de atunes y parece que el evento es todo un espectáculo...pero para ver el remate había que levantarse a las 4 am y nos pareció un poco demasiado. Fuimos más tardecito, a eso de las 8am e igual fue un show haberlo deambulado. Como les decía, venden seres marítimos de todo tipo, pero lo más interesante era presenciar el movimiento de los trabajadores que vienen y van transportando la mercadería, los que trozan las partes y algunos puestitos que ya te las venden cocinadas al lado. Se pueden apreciar todas las instancias del proceso de producción, y en el epicentro del lugar que provee alimento a toda la población. Para que se den una idea, este mercado mueve 5 MIL MILLONES de dolares en ventas anuales... ZARPADO!
En definitiva... si vienen alguna vez a Tokyo prepárense para meterse en este mar de locura, comer como osos y volver nadando!!... por no decir, rodando!!

Besoss!


SUSHI TOKYO


PERDIDOS EN TOKYO

16/12/2012 A ver... no es que me crea Scarlett Johansson (aunque ya quisiera!), pero verdaderamente no hay mejor título que éste para describir la odisea de ubicarse en esta capital japonesa.
Llegamos tarde, muy tarde y nos fuimos directamente al hotel que habíamos reservado... y en el camino le dejamos un ojo de la cara al taxista que nos lo agradeció con un "Arigato" y una sonrisa de feliz cumpleaños. Esta ciudad es MUY cara!!... y eso que venimos de Londres bien curtidos y aceitados.
Cómo explicarles mi primera sensación de "NO ENTIENDO NADA!!"?... creo que fue en el supermercado. Antes de dormir, bajamos con Joaco a comprar unas cocas para tener en el cuarto, y cuando entré y vi todas esas góndolas llenas de productos y paquetes raros, recién ahí entendí que efectivamente habíamos llegado. Agarraba algún paquete x, y no podía entender si era un budín, un queso o un pescado... y las letritas japonesas no ayudaban en nada porque mi mente occidental solo las identifica con dibujitos lindos o tatuajes raros. Claro, en Hong Kong todo estaba en chino-catones y también en inglés, pero acá en Japon tuve que experimentar de golpe lo que es ser un analfabeto y estar impedido de hablar o siquiera escuchar lo que te están diciendo.
Pero yo no puedo estar más feliz!! porque me encanta el desafío de lo nuevo, lo distinto y lo extraño!
El hotel está buenísimo!! pero por una cuestión de falta de espacio, los cuartos en Tokyo tienden a ser chiquitos... a tal punto que entrás y te tenés que tirar a la cama porque Joaco, yo y las valijas no entramos todos parados. Pero en este mini cuarto tenemos: mini mesa, mini silla, mini heladera, mini tele y, por supuesto, un mini baño. Y en este tema del baño me voy a detener un minuto para contarles sobre los inodoros eléctricos con panel de control incorporado. O sea, es algo de locos!! que no entiendo por qué el resto del mundo no lo ha adoptado!!. Son híbridos entre inodoro y bidet... en aparencia comunes, pero en el fondo super computarizados, porque tienen un panel lleno de botones entre los que podés elegir la dirección, la presión y la temperatura del agua, de acuerdo a lo que necesites en el momento indicado. No solo eso, algunos también tienen calienta asiento y un botonito para que después de lavarte te tire aire templado. Al final del asunto salís limpito y seco sin haberte movido ni ocupado. Simplemente fantástico!
Sobre los japoneses no tengo más que el MEJOR de los conceptos. Son una masa!, como dice Joaco... ultra respetuosos, simpáticos, tranquilos, honestos, inteligentísimos y super ordenados. Yo hasta ahora pensaba que los ingleses eran el summum de la amabilidad, pero ahora me doy cuenta que los japoneses les pasan el trapo. Cada vez que nos bajamos del subte y nos paramos a mirar el mapa para entender a donde estamos, no pasa ni medio minuto que aparece algún señor super amable y nos pregunta en inglés "How can I help?"... e incluso nos acompaña caminando para asegurarse de que no nos perdamos. Son gente increíble!! anoche fuimos a un restaurante local y una chica se ofreció a traducirnos el menú para que podamos pedir algo adecuado. Y aunque no hables su idioma, todos se esfuerzan para que los entiendas y siempre con una sonrisa de lado a lado. De lo mejor!... al final uno no se siente tan perdido porque sabe que está bien cuidado.
Y así arrancamos nuestro recorrido por Tokyo muy a gusto, sintiéndonos bienvenidos... Copados!
La ciudad es despampanante!! a tal punto que el concepto de "primer mundo" queda opacado. Tokyo es ultra moderna de punta a punta... llena de edificios espejados, avenidas arborladas, veredas impecables y autos que pasan pulitos y brillantes. La lista de mis "top-ten" ciudades esta cambiando radicalmente en este viaje.
Hay barrios para todos los gustos, los snobbish y de lujo, los tradicionales más locales, los tranquilos y los terriblemente locos, ferenéticos y transitados. Pero si tengo que destacar algo de esta urbe impresionante es el ORDEN. No importa si estás en la estación de tren más atestada o en el barrio más multitudinario, Tokyo sigue teniendo un orden envidiable, incluso en el medio del caos. O sea... esta gente pareciera tener un sensor que les impide chocarse unos con otros aunque sean millones caminando en distintas direcciones y en un espacio limitado. Hasta tienen veredas con carriles para los peatones!! uno de ida, uno de vuelta y una bici-senda al costado.... y todo el mundo los respeta estrictamente salvo los turistas inexpertos como Joaco y yo que corremos permanente riesgo de morir atropellados.
En definitiva, estamos maravillados!!
Y perdonen el bajón final pero se viene la autocrítica y el hachazo...porque como decía el premio Nobel de economía Paul Samuelson, existen 4 categorías de paises economicamente hablando:
- los paises ricos
- los paises pobres
- Japon y...
- Argentina
Según este economista Japon y Argentina conforman 2 categorías extra porque no entran en ninguna de las anteriores y son inexplicables. La Argentina porque siendo un país extramadamente rico en recursos, igual es pobre... y Japon porque siendo una isla pobre sin nada, igual es más rico que todos los anteriores.
Sólo para que reflexionemos y nos demos cuenta que esto ocurre por algo. Acá en Japon no tendrán recursos, pero tienen cultura, honra, respeto y amor por su país y el trabajo. Tenemos mucho que aprender todavía... no por nada los japoneses nos llevan tantos años!
Al final, me parece que perdernos aquí es lo mejor que nos podría haber pasado... nos va enseñar mucho y tal vez nos ayude a encontrarnos.

Sayonara... o adios!


TOKYO

HONG KONG I 'LL MISS YOU!

11/12/2012 Acá estoy de vuelta para continuar lo prometido. Y les escribo mientras sigo volando a Tokyo, pero después de haber hecho una escala, ahora estoy en otro avión distinto. Lo gracioso es que no es un avión de pasajeros japoneses como yo hubiera creído, sino que estoy rodeada de brasileros barra-bravas que están viajando a Tokyo para hacerle el aguante a su equipo. Resulta que, aparentemente, en Japon está aconteciendo una especie de mundial de football entre los clubs más importantes del mundo... asique acá estamos... volando a Tokyo Joaco y yo...y lahinchada de los Corinthians. Si los vierana los muchachos!!... les hubiera sacado una foto pero me dió miedito.
En fin... sigamos con Hong Kong...
Y para retomar el tema de la comida, vale aclarar que además de morfar como cerdos, también caminamos y quemamos calorías. Seguimos algunos tips de amigos y nos apropiamos de una guía de Matias... y con la guía en mano salimos a hacer las típicas cosas turísticas.
Fuimos al Man Mo Temple, uno de los templos chinos más antiguo de la ciudad y tratamos de entender un poco sobre sus Dioses, símbolos y ritos. Estaba lleno de saumerios, ídolos y flores... y en la salida, unas oficinitas laterales con adivinadores de suerte y expertos en astrología.
También fuimos al Victoria Peak, una colina alta con una de las vistas panorámicas más lindas de la ciudad y de la bahía. El paseo está bueno porque subís en una especie de trencito inglés antiguo que quedó en funcionamiento desde la época colonialista.
Ya no queda mucho del Hong Kong británico, sólo algunos detalles como éste trencito, los tranvías de dos pisos, unos pocos edificios coloniales y un par de tiendas típicas londinenses... como Harvey Nichols o Marks and Spencer. Tal vez el edificio de arquitectura colonial europea más típico e imponente es el Hotel Península, que a pesar de haber sido construído en 1928, todavía conserva su lujo intacto y su tradicionalismo. Con Joaco entramos y es verdaderamente maginífico en todo sentido, sobretodo por el detalle del helipuerto y los rolls-royces en la puerta esperando a conducir a algún afortunado huesped a cualquier destino.
Sacando esas cosas, me atrevería a decir que en Hong Kong de antiguo no queda mucho... o mejor dicho, casi nada.
El centro de la ciudad es netamente modernoy bastante chico... se conoce rápido... y hasta tiene un aire de "pueblo", por así decirlo. O sea, es normal salir a la calle con alguien local, como Mati, y que se encuentre con amigos, gente conocida o compañeros de trabajo. Y esto ocurre principalmente porque los "expats" (extranjeros expatriados por trabajo) viven todos en Hong Kong Central, cerca de las oficinas, la joda y, en lo posible, de un supermercado.
Los bares y boliches son un capítulo aparte... tienen mucha onda!! y la joda es alucinante. Y como detalle muy bizarro, les cuento que en Hong Kong muchos locales, restaurantes, boliches y bares están instalados en departamentos. Fuimos a un bar, por ejemplo, que quedaba en el piso sexto de un edificio X... entramos, subimos en el asensor y cuando llegamos al sexto se abrieron las puertas y nos encontramos con un patova paradito en el pallier con cara de malo (eso parece que es universal)... pero todo muy extraño!!. Después entrabas al depto y de repente FIESTA, boliche, gente, tragos, barra y de fondo uno hitazo de James Brown sonando... "get uppa, get uppa... I feel like being a sex machine"... BUENISIMO!!.
Y otra rareza, media pava, pero que me llamo mucho la atención es que cuando arreglan o construyen edificios los andamios no estan hechos de hierro sino de caña. Raro no?
Como sea, lo cierto es que al cabo de unos pocos días ya nos conocíamos casi todo el centro, por lo cual decidimos cruzar el canal e irnos al Hong Kong continental. Para eso nos fuimos al puerto y nos subimos a Star ferry que es un barquito comodísimo que te lleva al otro lado (llamado Kowloon) por 25 centavos de dolar ... y el paseo es lindísimo!!!. Una vez Kowloon nos fuimos al Museo de Arte de Hong Kong que no es nada del otro mundo pero vale la pena por su colección de porcelanas y dibujos. Después fuimos a un "night market" callejero, y ya para terminar el día, nos instalamos en la costa a disfrutar de la increíble perspectiva del centro. Fue zarpado ver el Show de las Luces con sus flashes enceguecedores desde un primer plano.
Para cuando llegó el fin de semana, ya habíamos visto casi todo lo importante, por lo que el domingo decidimos embarcarnos a Lantau que es otra isla muy cercana... que merece una visita si hay tiempo y ganas. Fuimos con Mati y su amiga japonesa y nos quedamos a pasar un día lindísimo que consistió en un almuerzo en la costa, un viaje en funicular y unas vistas del mar espectaculares... y para terminar, una visita a un famoso Budha gigante.
Al día siguiente también se nos dió por explorar un poco más allá y nos fuimos a Macau, otra isla cercana que fue colonia portuguesa hasta hace unos años y que ahora se transformó en un centro de timba y juego SIDERAL... una especie de sucursal de Las Vegas pero para el público oriental. Es un lugar loquísimo, lleno de hoteles y mega-casinos, pero a la vez bastante pobre y decadente en algunas zonas en particular. Para ser sincera, no nos gustó mucho ni a mi ni a Joaco...pero hay que tener en cuenta que fuimos de día (tal vez de noche es otra historia) y con poca información sobre lo que valía la pena mirar. Solo nos dedicamos a recorrer el Hotel Venetian, que es una copia de la Piazza San Marco y el Gran Canal (con gondolas incluídas)...y antes de volver a Hong Kong dimos una vuelta por el centrito portugués y colonial.
Y así... entre paseos, comida, amigos y otras islas... se nos pasó la semana y llegó el momento de la partida.
Contentísima me fuí habiendo aprendido y conocido un lugar nuevo y completamente distinto. Me voy llena de recuerdos lindos!
Mi super "highlight" de Hong Kong: una noche que nos fuimos con Joaco a tomar unos tragos al bar Sevva, en la terraza del Mandarin Oriental... los dos juntos en ese lugar increíble y envueltos en una brisa romántica y marítima. Una bandita en vivo tocando jazz... y de fondo los edificios imponentes y las luces encandilantes de la ciudad. Uno de esos momentos que no me voy a olvidar más...
Espero que hayan disfrutado mis anécdotas de Hong Kong, y los dejo porque ya aterricé en Tokyo y los barra-bravas ya me estan distrayendo con sus cánticos de hinchada.

Los extrañooo! besotesss

Delfina.


HONG KONG




MY WEEK IN HONG KONG I

11/12/2012 Nuestra semana en Hong Kong pasó rápido, muy rápido... como suele pasar todo lo bueno. Y ahora ya estoy en el avión pegada a la ventana, tratando (sin éxito) de darle un último vistazo a esta ciudad inolvidable.... y algo contaminada. Solo alcanzo a ver una leve sombra de los edificios a través de la bruma constante que rodea la ciudad. Una bruma espesa que yo al principio atribuía al vapor y a la humedad, creía que era una especie de London Fog en versión tropical. Y aunque me hubiera gustado quedarme con esa idea más "romántica", después me terminé enterando de que en realidad es una masa de monóxido de carbono que viene desde la China continental. Sí, ya sé... me fumé una semana de humo tóxico, pero no en vano... porque la pasé espectacular!!
La gente, las vistas, la comida y la buena compañía resultaron en unos días de maravilla y para recordar.
Qué hicimos?? es difícil de resumir y contar.... pero hagamos el intento, total sigo en el avión rumbo a Tokyo y me quedan como 3 horas de vuelo.
Bueno... los primeros días fueron más de reconocimiento. Salimos con Joaco a caminar la ciudad, un poco sin rumbo y con el objetivo de perdernos y observar. Recorrimos todo el centro financiero que es simplemente ESPECTACULAR. Como les contaba en mi post anterior, en Central Hong Kong predomina el lujo y el despliegue arquitectónico con un diseño ultra moderno y original. Pero ojo! no todo es tan homogéneo... a medida que uno se va metiendo en las callecitas derivadas de las grandes avenidas, la cosa contrasta y cambia hacia lo más auténtico y local: los puestitos callejeros vendiendo baratijas y cualquier tipo de pavadas, los mercados improvisados de frutas, carne, verduras y pescado... los barsuchos locales con gente comiendo rarezas en mesas de plástico en la calle... y todo esto, tal vez a media cuadra del local de Prada o Versace. Así es un poco la cosa... tenés una vidriera ultra chic con vestidos carísimos y radiantes... y a unos pocos pasos, un puestito precario con mondongo y pescados colgando al aire. Me encanta! porque además la gente consume eso!! o sea, se compran el vestido y también se compran el pescado callejero porque, aunque no lo crean, es el más sabroso y fresco.
Y así, deambulando por las calles, los túneles y los paqrues terminamos en el IFC (International Financial Centre) que es un complejo magnífico, mezcla de shopping, puerto y centro financiero. Uno entra ahí y hasta el más férreo enemigo del shopping (o sea, Joaco) queda maravillado. Es todo vidriado, con vistas a la ciudad y la bahia, los locales son perfectos, y ni hablar de la ropa y los diseños! Todo es divino... y las decoraciones de navidad de las más lindas y originales que he visto (montañas nevadas y funiculares de mentira, o un arbolito hecho de vestidos, por ejemplo). O sea... no hay forma de no entrar al Patio Bullrich y largarte a llorar después de haber visto esto.
Después de mi deleite, al dia siguiente le tocó el turno a Joaco: nos fuimos a otro shopping, el tecnológico. IMPRESIONANTE!! toda la tecnologia habida y por haber junta en un mismo tiempo y espacio. Hasta yo estaba copada! a tal punto que después de una hora de estar ahí a Joaco le empezó a agarrar una especie de desesperación claustrofóbica (yo creo que estaba demasiado emocionado), y yo seguía mirando como hipnotizada sin poder irme de esa especie de tecno-cyber-espacio. Igual, no salimos ilesos: Joaco se compró un smart phone y yo un teclado para el ipad (con el cual les estoy escribiendo).
Pero no se crean que solo nos quedamos con la superficialidad del shopping, tambien disfrutamos de la cultura, la comida y los templos.
En términos culinarios, Hong Kong es MUY completo... tiene excelente comida china, pero también deliciosa comida internacional de cualquier lado. Según me contaba Matias y una amiga que vivió acá un par de años, uno se puede pasar la vida en Hong Kong sin probar la comida china, ni un bocado. Pero por supuesto, con respecto a la comida china, nosotros estabámos más que interesados, asique Mati nos llevó a "Din Tai Fung", un lugar de comida tipo "dim sum" ALUCINANTE!. Comimos los auténticos dumplings de cerdo, cangrejo y langostinos... unos pepinos marinados, chauchas con cerdo frito y un mondongo hervido y condimentado... de bebida té caliente, y de postre unas cuestiones muy raras que no sé ni como describir (pero hay fotos!).
También fuimos a un restaurant Vietnamita MUY bueno en donde probé calamar relleno y una ensalada riquísima de langostinos y pomelo... y todo mientras tomaba jugo de un coco abierto. Y otro memorable fue un restaurant thailandés al que fuimos el primer día... sabrosísimo!... sin duda me debo haber engordado unos kilitos...
Bueno... como verán la capacidad de "resumir" no es lo mio, asique voy a tener que recurrir al "To be continued..." y seguir con las vivencias de Hong Kong en mi próximo capítulo.
By the way... atrás quedaron las delicias de Hong Kong porque en frente tengo la comida del avión con los paquetitos de plastico y aluminio. Temo que la voy a dejar pasar porque no tiene muy buena pinta... y además con todo lo que vengo comiendo creo que tengo reservas para rato!

Besos gigantes!!

Próximamente... más Hong Kong y los detalles de la llegada a Tokyo!


HONG KONG I

HONG KONG SPARKS!!

08/12/2012 Hoy es el día de la Virgen, y el día en el que por alguna extraña y no-vinculada razón se arman y prenden los arbolitos de navidad. Sin duda, un día muy alegre y lleno de espectativas... cargado de energía navideña, de fiestas y de planes para el año que vendrá. Y yo por primera vez en mis 30 años (auch!), en este día, estoy lejos de mi casa, de mi país y de mi familia. Pero a pesar de estar MUY lejos de casa y de la posibilidad de armar mi propio arbolito personal, Dios y yo sabemos muy bien que no me puedo quejar para nada... porque estoy en una ciudad que es en sí misma un GRAN, BRILLANTE Y PONPOSO arbol de navidad!!! una ciudad que irradía pura energía, calor y prosperidad.
Como empezar a describir HONG KONG?? como describir con palabras una ciudad que pasa puramente por lo sensorial??
Bueno, tal vez un buen comienzo para ustedes es primero explicarles QUE HAGO ACA!
Nada... simplemente con Joaco decidimos explorar esta parte del mundo tan lejana y venir antes de que se nos aleje más! O sea era ahora o nunca:
- Estamos en Londres (o sea, a mitad de camino de tener que cruzar el mundo desde Argentina)
- Todavia no tenemos niños que criar y cuidar
- Joaco justo en Diciembre tiene vacaciones del master
- Y tenemos un par de muy amigos viviendo por aquí que queríamos visitar
O sea, BINGO!!... esta alineación de planetas se da una vez en la vida!!!... a sacar los pasajes YA!
Y así fue como armamos este viaje oriental que empieza acá en Hong Kong y después sigue por Tokyo, Kyoto, Shanghai y Beijing.
Como se podrán imaginar estoy FASCINADA!! C-O-P-A-D-I-S-I-M-A de estar finalmente acá!!
Tengo que confesar que, incluso desde Londres, el viaje es MUY largo y el cambio de horarios te enloquece el sueño, el cuerpo y la mente a un punto cuasi-letal, sobretodo para los más estruturados acostumbrados a sus rituales sagrados siempre a la misma hora y lugar... y aunque no es mi caso, lo estoy sufriendo igual. Hace 3 días que llegamos y todavía seguimos en estado semi-fantasmagórico y despertándonos a las 3.30 de la mañana con la sensación de: "ok, ya dormí todo lo que tenía que dormir y ahora no puedo dormir más". Es duro...
Sacando de ese detalle, la experiencia es espectacular!
Es una ciudad rara, que al principio cuesta entender pero después te sorprende cada vez más. No se... por lo menos yo, tenía algunos pre-conceptos que se me fueron por la borda y otras cosas nunca me hubiera imaginado. Por empezar, no me imaginaba que Hong Kong fuera tan occidental... ni tampoco me imaginaba que fuera una ciudad emplazada en el medio de una despliegue montañoso, selvático y tropical.
Llegamos y nos instalamos en lo de Mati, íntimo gran amigo de Joaco, que vive y trabaja acá desde hace 1 año. Lo primero que vi desde este piso 23 del departamento de Mati fue una vista imponente, mezcla de selva y manchones de mega-torres de vidrio, acero y cemento al pie de los montes verdes. Una mezcla urbana y natural. Impresionante!! Después de comer en un restaurant thailandés y ponernos al día con Mati, nos fuimos a dormir porque no dábamos más.
Al otro día salimos a caminar y a reconocer un poco el centro de la ciudad, y mi sensación fue "Wuaw!"... es New York con un touch de Asia style. Los rascacielos enormes e imponentes, las calles atestadas de gente (con un muy alto porcentaje de gente occidental), los locales de lujo, los shoppings grandiosos, las luces, el movimiento... y toda esa energía que viene y que va. Los edificios están conectados unos con otros por adentro a través de puentes, o sea que uno puede cruzar gran parte del centro financieron circulando por esta red de puentes de lujo que conectan edificios y shoppings y, de paso, están adornados con locales de Gucci, Armani, Chanel, etc por si querés comprar. Es decir... les estoy hablando de una ciudad donde los locales de Luis Vuitton son como kioscos que uno se encuentra en cada esquina, en donde muchas mujeres se compran una cartera de 3000 dolares mientras vuelven camino a su casa, como quien aprovecha para pasar por el super a comprar la leche para el desayuno del otro día.... y no exagero!. El consumo es realmente zarpado... tal vez mayor que el consumismo norteamericano.
Y esto que parece algo tal vez violento, en realidad termina siendo pintoresco e identificatorio. la identidad de Hong Kong es esa... la del lujo extremísimo.
Los edificios son, algunos, esculturales... puro diseño, uno al lado del otro como compitiendo por su originalidad. Y todos los días a las 8.00 pm los principales rascacielos compiten otra vez en un juego de luces que desencadena un espectaculo sin igual. Desde el primero hasta el último piso, cada edificio empieza a dibujar toda su estructura con luces de colores... un flash de neon y leds que deja a las misma estrellas en un segundo plano.
Así es Hong Kong a grandes rasgos... breathtaking! ... radiante y lujosa como un arbolito de navidad con diamantes titilando.

En fin...después les seguiré contando!

Besos enormesss!!





















I AM BACK!!... FROM PARADISE

08/12/2012 Hola queridísimos amigos!! He vuelto!!... y he vuelto para quedarme...
Pero la pregunta que me han hecho muchos es: por qué desaparecí, en primer lugar?? y bueno... la respuesta es difícil de explicar porque puede sonar un poco tonta y banal, teniendo en cuenta que no me queda otra opción más que simplificar.
Se podría decir, en pocas palabras, que me pasión por escribir me genera tal intensidad que en un momento sentí que estaba más obsesionada con mis relatos en el blog que con vivir plenamente toda mi experiencia acá. Es decir, de repente me encontraba a las 4 am enchufadísima en la compu describiendo mis aventuras en formato virtual... y después me pasaba 2 días deambulando cual zombi por la vida real. Es raro... y repito, puede sonar tonto, pero lo cierto es que en algún punto me "freak-ié" y decidí que era mejor vivir mis días plenamente y disfrutarlos lo más... y después... después tendré tiempo para contar.
En fin, no sé si hice bien o si hice mal, pero estoy segura de que los que me conocen bien y saben que tengo tendencia a dormir MUY MAL, tal vez me entiendan mejor y me puedan perdonar.
Pero anyway! la good news es que estoy acá!! y que tengo planeado quedarme por mucho tiempo más. Gracias a muchos de ustedes que me alentaron a seguir con esta historieta de mis andanzas por aquí y por allá, he vuelto REALODED y pienso continuar... dormida, despierta, zombi o fantasmal... sólo quiero seguir con esta aventura y con lo muchísimo que tengo para contar.
Después de haber pasado un año INCREIBLE, lleno de experiencias nuevas, viajes, amigos, familia, cultura, felicidad... les puedo asegurar que ya creo que aproveché todo lo que podía aprovechar. Y ahora ya no me importa si tengo que dormir un poco menos para esperar que la inspiración nocturna me invada y me haga re-soñar mi realidad... no importa porque simplemente me gusta demasiado escribir y entendí que a muchos de ustedes les llega y también lo pueden disfrutar.

GRACIAS AMIGOS por bancarte, motivarme y traerme de vuelta a la virtualidad!

Los saluda Delfi desde Hong Kong...
con un tremendo jetlag...
a las 4.58 am de acá...